Después de haber celebrado los misterios de la Pasión y Muerte del Señor Jesús, nos alegramos de sobremanera por la Triunfante Resurrección.
En verdad es cierto lo que se nos anunciaba en el Pregón Pascual durante la Vigilia Pascual:
"Feliz culpa que nos mereció tal Redentor".
Porque Cristo se ofreció al Padre hasta derramar su sangre de manera tan terrible. En estos tiempos es necesario meditarlo muchísimo, porque sino quedaría como un mero Sentimentalismo.
Ahora, la Pascua no debe quedar como un "ya cumplí con la Semana Santa y nada más hasta el proximo año", porque nuestra Fe debe encenderse más con estos Misterios que hemos contemplado durante estos días.
Hemos participado de las Celebraciones y los Cultos. Las Procesiones nos han dado una Catequesis Plástica, una oportunidad de sentirnos acompañados por el Señor y Nuestra Madre, un sentir que "caminan con nosotros y por donde nosotros pasamos todos los días". Han santificado nuestro trajinar.
En este año de la Fe, deseamos que las Palabras del Evangelio de este glorioso Día de Pascua se cumplan:
"Entonces entró también el otro discípulo, el que había llegado el primero al
sepulcro; vio y creyó"
Que Nuestra Madre Santísima nos ayude a comprender la maravilla de la Pascua, y nos lleve al encuentro del Resucitado.
El Equipo de "Siempre con María" les desea a todos y cada uno de ustedes hermanos y hermanas:
Una Santa y Feliz Pascua de Resurrección
¡Ven, Vive con nosotros y con ella esta fiesta Maravillosa de la Pascua!
